23/11/16

27 de Noviembre “Día Nacional de la Diversidad Sexo Genérica” en Ecuador


Publicado es: CUERPOS DISTINTOS DERECHOS IGUALES·JUEVES, 16 DE JUNIO DE 2016
Reseña por: Elizabeth Vásquez, Quito 16 de junio de 2016.

Hoy, 16 de Junio de 2016, se materializa un sueño más de esos que Patricio Brabomalo Molina (1977-2005), habría querido ver. La Asamblea Nacional del Ecuador acaba de proclamar oficialmente al 27 de Noviembre como el Día Nacional de la Diversidad Sexo Genérica. Este es el nombre que el activismo transfeminista le ha dado a la fecha por años aunque no fuera "oficial", desde la firme convicción de que los movimientos sociales debemos conocer nuestra historia local tanto como la global.

Casi 19 años han transcurrido desde aquel 27 de noviembre de 1997 en que el Tribunal Constitucional del Ecuador declaró la inconstitucionalidad del inciso 2do. del artículo 516 del Código Penal y lo anuló. La norma criminalizaba "el homosexualismo" consentido entre varones adultos.

Curiosamente, la despenalización fue un proceso en el que intervinieron diversas identidades sexo-genéricas. Detrás de una cara pública trans - detrás de esas trabajadoras sexuales de los márgenes que pusieron el cuerpo -, una demanda con firmas ciudadanas mayoritariamente femeninas (posiblemente de mujeres heterosexuales), pidió al Tribunal Constitucional que se despenalizara una práctica sexual entre hombres. Aunque el lesbianismo no estaba tipificado por falta de "acceso carnal" (por una vez gracias a la limitada "imaginación del legislador"), gran parte del trabajo organizativo en pro de la despenalización fue un trabajo lésbico, silencioso e invisibilizado, en tanto que los rostros protagónicos del proceso fueron mayoritariamente masculinos. El proceso, además, no surgió de la nada. Ecuador tuvo su propio "Stonewall" en el bar “Abanicos” de la ciudad de Cuenca, y el acumulado político del feminismo autónomo, al igual que el del movimiento indígena, jugaron su parte.

Siempre será necesario dejar constancia de que el homosexualismo consentido entre varones adultos no se despenalizó por las razones que hubiéramos querido en Ecuador. Se despenalizó oficialmente bajo el criterio de que los homosexuales eran “enfermos” y que, por tanto, evitar que la enfermedad se propagara en las cárceles era la mejor opción. Aún así, la anulación del artículo 516 del Código Penal es memorable. Es un hito por el camino que abrió y, sobretodo, por el camino difícil que los colectivos LGBTI organizados - que empezaron a usar estas siglas tan pronto se dio la despenalización - supieron recorrer y siguen recorriendo para transformar la mentalidad discriminatoria de aquella sentencia constitucional y la de toda una sociedad. Proclamar la fecha en Día Nacional de la Diversidad Sexo-Genérica es seguir transformando esa mentalidad y afirmar lo mucho que queda por hacer.

Celebramos entonces que el 27 de Noviembre haya sido aquel día en que, recogiendo las palabras de Patricio Brabomalo, en Ecuador “pasamos de la noche a la mañana de maricones a LGBTI; de delincuentes a sujetos de derecho”.

Manabí y la resistencia trans


Publicado en: CUERPOS DISTINTOS DERECHOS IGUALES. MIÉRCOLES, 11 DE MAYO DE 2016

Quienes tienen alguna familiaridad con las reivindicaciones de género en Ecuador saben que Manabí es “fortaleza de la identidad trans”. Es una provincia con comunidades de base trans que tejen redes sociales y económicas entre ellas y con el resto de la población; gente particularmente “lanzada”, emprendedora y orgullosa de su identidad cultural y sexo-genérica, cuya vida gira entorno a los oficios tradicionales como la peluquería, la pesca, la cocina, el trabajo sexual, la organización de eventos festivos, y el activismo por los derechos humanos. Cuando decimos Portoviejo, Manta, Montecristi, Jaramijó, Picoazá o Chone, pensamos en la tierra de esa generación trans que se animó a entrar a la universidad más que en otras ciudades pese a la exclusión histórica, la tierra de la primera médica trans graduada en Ecuador, la tierra de los transmasculinos que se ponen su propio negocio, o que trabajan en las fábricas de harina de pescado, y la tierra de múltiples androginias montubias que no tienen ni necesitan nombre.

Varios colectivos manabitas integran la CONFETRANS desde hace más o menos una década y han participado con su presencia en los procesos políticos más importantes del activismo trans y transfeminista ecuatoriano. Son amig@s que se juntaron al sueño de la CONFETRANS cuando hacíamos reuniones en una pista, un aula escolar o una peluquería, y cuando luchábamos por el reconocimiento de la identidad de género en Montecristi. Son amig@s que participaron de la campaña de cuatro años “Mi Género en Mi Cédula” que, en diciembre de 2015, obtuvo un primer logro parcial cuando la Asamblea Nacional aprobó la posibilidad de que las personas “que así lo deseen” porten género en lugar de sexo en sus documentos de identidad. El grito de “¡aquí está la resistencia trans!” que ha resonado en la Asamblea a lo largo de estos años de lucha por la identidad ha sido en gran medida un grito manabita. El Manabí trans ha aportado garra, entusiasmo, empoderamiento decolonial dada la fuerte presencia de transgenerismos no binarios en su cultura, y esa increíble capacidad de combatir con humor la adversidad de la vida en los márgenes.

Desde el activismo transfeminista, vivimos el terremoto del 16 de abril con particular preocupación por la situación de las comunidades trans que han sido parte de una historia política y afectiva tan intensa. Procuramos inmediatamente el contacto con las lideresas y líderes que conocemos y organizamos apoyos dirigidos específicamente a esas comunidades. Contamos con la maravillosa solidaridad de comunidades de migrantes ecuatorian@s, chican@s, latin@s y y afro-queer de los Estados Unidos que canalizaron su apoyo a través de la plataforma “Chicha Radical” y de la activista Bani Campuzano, así como la de amigas en España, académicas y activistas feministas que han seguido de cerca nuestro trabajo y que no dudaron en hacer su aporte económico.

Tras coordinar algunos envíos de kits de emergencia, en días iniciales en que el agua y la comida eran lo fundamental, salimos de viaje para una visita personal y la entrega de kits de higiene el pasado viernes 6 de mayo. Atravesamos los escombros de Tarqui donde murió Michelle, de la comunidad trans de Manta, y visitamos las peluquerías destrozadas de Jocay. Visitamos a Luisa María, una peluquera trans de tercera edad que realmente se ha quedado en una situación crítica, sin techo y ofreciendo cortes de pelo a la luz de una vela. Personas como ella no se han acogido a los albergues coordinados por el MIES porque la vida trans del margen tiene otras dinámicas y otras lógicas. Su distancia respecto de las instituciones oficiales del Estado es algo que la política pública tiene que comprender para empezar a llegar de verdad. Mapeos específicos de poblaciones específicas son un buen punto de partida en este sentido. También visitamos a Marquito, transmasculino de Jaramijó y hombre-madre que perdió su casa pero no su taller de reparación de bicicletas y que, por lo tanto, sigue trabajando.

Más allá de lo difícil de los relatos de la pérdida humana y material, conversamos con las integrantes de las organizaciones Luvid y Horizontes Diversos sobre qué tipo de apoyo sería el más eficaz, capaz de trascender el corto plazo. Todas coinciden en que lo más valioso son los esfuerzos por contribuir a la reactivación económica; en este caso a la reactivación de las redes socio-económicas y solidarias que ya organizan la vida trans en Manabí: implementos y herramientas de trabajo, por ejemplo, son una prioridad.

  Tras cocinar todo el día, Chavica dirige unas palabras a nuestras invitadas trans y aliad@s LGB que participan en la cena del viernes; un pretexto concebido como parte de ese abrazo colectivo que nos queremos dar para recordarle a Manabí que cuenta con mucha gente del activismo trans y del activismo feminista; gente que valora la lucha trans en Ecuador y en otras latitudes. En medio de la comida, el humor trans poco a poco vuelve a aparecer: “Si ese día hubiera habido un reinado de belleza en Tarqui se extinguían todas las trans de Manabí… Y ahí sí los fundamentalistas hubieran dicho que fue un castigo divino… Chavica, ¡ya cambia esa vida tuya, niña!”.

  Nos reconforta saber que son gigantes y se van a levantar con su humor, con sus redes, con las necesarias intervenciones de la política institucional y con mucho trabajo. Y vamos a seguir caminando juntas en la lucha por que el sexo se suprima de una vez de todos los documentos de identidad ecuatorianos y se reconozca el género universal, en la lucha por la salud y la autonomía de los cuerpos femeninos y trans, y en la lucha contra la violencia de género. Fue una breve visita, de muchas por venir, para recordar que en Manabí sigue estando la resistencia trans.

Texto: Eli Vásquez - Fotos: Ana Almeida - Agradecimientos: Organizaciones confederadas Horizontes Diversos - Luvid - E. Jaramijó - Chavica Moreira, Snickers Mora, Polet Pico, Nanny Rodríguez, Luisa María Acosta, Edi Almeida y a la Plataforma “Chicha Radical” por su apoyo.

20/12/15

Asamblea Nacional de Ecuador aprueba Ley de Datos Civiles con cambios en la cédula



Género en la Cédula de Identidad Ecuador

Por: Teresa Menéndez Torres
Ecuavisa.com


Con 77 votos a favor, 2 en contra, 1 blanco y 20 abstenciones, la Asamblea Nacional aprobó la tarde de este 10 de diciembre de 2015 el proyecto de Ley del Servicio Nacional de Gestión de la Identidad y Datos Civiles, que plantea algunos cambios en la cédula de identidad.

La ley vigente data de 1976, es decir desde hace 39 años no se han efectuado modificaciones al cuerpo legal. Entre los cambios propuestos constan: reemplazar la palabra "sexo" por "género", que un ciudadano mayor de edad pueda decidir el orden de los apellidos, y ocultar la profesión en el documento de identidad.

Asimismo, define un Documento Nacional de Identificación (DNI), en reemplazo en la cédula de ciudadanía, para "garantizar el reconocimiento al derecho de la identidad de género y eliminar cualquier forma de discriminación hacia las diversidades sexuales, como lo establece la Constitución", argumentó Richard Calderón, presidente de la Comisión de Gobiernos Autónomos, Descentralización, Competencias y Organización del Territorio, encargada de tramitar el proyecto.

En cuanto al cambio de "género" por "sexo", Calderón destacó que se establece el derecho que tienen las personas a autodeterminar su género, pero que esto lo decidirá el ciudadano o la ciudadana mayor de edad.

Finalmente, se cambia el nombre Servicio Nacional de Gestión de la Identidad y Datos Civiles por Dirección Nacional de Gestión de la Identidad y Datos Civiles.


Mi Género En Mi Cédula


Entre las reformas menos conocidas de la propuesta "Mi Género en Mi Cédula", está una norma que se ocupa de un asunto de forma, pero no por ello poco importante: Proponemos que la ley ordene la obligatoria correspondencia entre la identidad de género (recogida en la imagen y/o nombre de la cedulada) y el género gramatical empleado en documentos públicos y oficiales. Esto pondría fin a una de las formas más usuales de violencia institucional y violación de la intimidad de las personas trans en Ecuador, que se produce cuando las instituciones públicas insisten en RESALTAR el sexo biológico/legal de personas que han cambiado de nombre y utilizan fórmulas como “la señorita Carlos Mario S.”, “el inscrito Analía G.” o “la demandada Juan José M, ecuatoriana, soltera (…)”. Quisiéramos poner fin a estas redacciones oficiales tan cotidianas que escogen incurrir en absurdos lingüísticos en lugar de respetar la identidad de género de todas las ciudadanas y, de paso, la Constitución del Ecuador.


Campaña Mi Género En Mi Cédula















El 6 de Junio de 2012, la Confederación Ecuatoriana de Comunidades Trans e Intersex CONFETRANS - Proyecto Transgénero - Construyendo Igualdad - Silueta X - presentaron un Proyecto de Reformas a la Ley de Registro Civil del Ecuador que sustituye el SEXO por el GENERO en la cédula de ciudadanía ecuatoriana.

La Campaña "MI género en MI cédula", que acompaña al proyecto de ley, se presentó en la Comisión de Gobiernos Autónomos y Descentralización de la Asamblea Nacional del Ecuador, el 23 de Julio de 2012. 

Redacción: Elizabeth Vásquez.


...¡ A una letra de ejercer ciudadanía!

3/9/14

Propuesta y fundamentación jurídica de la inclusión del GENERO como dato en la cédula de ciudadanía ecuatoriana: “Si es Mi Cédula, Tiene que ser Mi Género”

El día 3 de septiembre de 2014 colectivos de personas transgéneros y transexuales agrupadas en el PACTO TRANS presentaron ante la Comisión de Gobiernos Autónomos, Descentralización, Competencias y Organización Territorial de la Asamblea Nacional del Ecuador, la propuesta de inclusión del GENERO como dato en la cédula de ciudadanía ecuatoriana: “Si es Mi Cédula, Tiene que ser Mi Género”









17/6/14

Ámbito Legal: Iniciativas de uso alternativo del Derecho

2002: (1) Implementación de la “Patrulla Legal”: Creamos una unidad móvil que opera con metodologías propias de “derecho callejero” y que, a lo largo de once años ininterrumpidos de actividad (a la presente fecha) ha recorrido una superficie enteramente mapeada de zonas de trabajo sexual trans informal en la ciudad de Quito durante tres noches y madrugadas a la semana brindando servicios gratuitos de “asesoría jurídica itinerante”. La Patrulla Legal es el componente fundacional del Proyecto Transgénero. Sus más notables resultados son la reducción de detenciones arbitrarias y abuso policial, la implementación de normas y políticas en beneficio de la población beneficiaria y el fortalecimiento de su tejido organizativo plasmado en la creación de cuatro asociaciones de trabajadoras sexuales trans. Durante los primeros cuatro años (2002-2006), se diseñan y se perfeccionan cinco metodologías originales de la Patrulla: Diario Patrullero (bitácora), Asesoría Legal Preventiva, Intervención Legal Emergente, Litigio Paradigmático y Conformación de Asociaciones. *En kilómetros, la Patrulla Legal ha dado siete vueltas al territorio nacional desde el Carchi (norte) al Macará (sur).

2007: (2) Patrocinio del caso Ciudadana Luis Enrique Salazar contra el Registro Civil del Ecuador: El Proyecto Transgénero impulsa un reclamo administrativo interpuesto por una trabajadora sexual trans miembro de la asociación callejera “La Y” contra la negativa del Registro Civil de cedularla de conformidad con su identidad femenina. El caso marca un hito en materia de identidad civil en nuestro país al concluir en una resolución de obligatorio respeto a la imagen trans en la cédula de ciudadanía y la introducción de normas que facilitan los cambios de nombre y sexo de las personas transgénero en el protocolo institucional.

2009: (3) Implementación de la “cédula de identidad alternativa” para trabajadoras sexuales trans: El Proyecto Transgénero es autor del diseño de un sistema alternativo de identificación para las miembros de las Asociaciones de Trabajadoras Sexuales Trans Callejeras. Consiste en un carnet que cumple una doble función: en el anverso, presenta una identificación respetuosa de la identidad trans callejera, con reconocimiento del nombre cultural por oposición al nombre legal, del género por oposición al sexo legal y de la intervención corporal (dato relevante en el contacto con la Policía Nacional, que incorporó normas relativas al tratamiento de los cuerpos distintos). En el reverso, contiene una enunciación clara y sucinta de los derechos constitucionales de que las trabajadoras sexuales trans son titulares y que de otro modo sólo se ubicaría invocando normas extensas y desperdigadas en toda la Constitución. Respetada por la Policía Nacional y por varias instituciones públicas, la cédula de identidad alternativa de las trabajadoras sexuales trans se ha convertido en una poderosa herramienta de afirmación identitaria, defensa jurídica y asociación gremial.
http://www.awid.org/esl/Las-Noticias-y-Analisis/Notas-de-los-Viernes/Derechos-de-las-personas-transgenero-en-el-Ecuador-Una-absolucion-legal-espacial-politica-y-cultural

http://www.awid.org/eng/News-Analysis/Friday-Files/Transgender-Rights-In-Ecuador-A-Legal-Spatial-Political-And-Cultural-Acquittal

2010: (4) Celebración del primer matrimonio gay en Ecuador: Diseñado y promovido por el Proyecto Transgénero, se celebró en el Registro Civil del norte de Quito el 10 de diciembre de 2010 entre un hombre transgénero (en transición legal de mujer a hombre), británico, de nombre Joey Hateley; y un hombre biológico (nacido y asignado “varón”), ecuatoriano, de nombre Hugo Vera. Basada en el uso alternativo del Derecho, se trató de una intervención que creó una paradoja jurídica: el Registro Civil del Ecuador se vio obligado a decidir entre la posibilidad jurídicamente viable de admitir la celebración del matrimonio argumentando que la pareja estaba integrada por “un hombre y una mujer” y la posibilidad también jurídicamente viable de inadmitir la celebración bajo la consideración de comparecían dos hombres. En el primer dictamen, “pierde lo trans” (Hateley es reducido a “mujer”) pero “gana lo gay” (se celebra un matrimonio entre personas de género masculino). En el segundo dictamen, “pierdo lo gay” (se ratifica que dos hombres no tienen derecho a casarse) pero “gana lo trans” (se reconoce que un hombre trans es “hombre” ante la ley). Como era de esperar, el Registro Civil prefirió celebrar un matrimonio “extraño” que admitir el hecho de que sexo y género no son las categorías rígidas e inequívocas que el sistema jurídico pretende. Sin embargo, la reflexión social, política y jurídica que suscitó esta intervención ha acelerado profundamente la discusión del matrimonio igualitario en Ecuador. El impacto y eficacia de nuestra estrategia ha generado réplicas en otros países, como Turquía (2011) y Chile (2013). El proyecto se planteó como una colaboración arte-derecho en la que, además del acto formal del matrimonio, se produjeron y presentaron varias intervenciones artísticas. http://youtu.be/4g36ZYNV-IA

http://www.latinart.com/spanish/aiview.cfm?id=438

http://www.latinart.com/spanish/aiview.cfm?id=442

2011-2013: (5) Implementación de Proyecto Mediación aplicada a la Diversidad Sexo-Genérica: Ejecutada con apoyo del Ministerio de Cultura del Ecuador a través de un seminario intensivo por año, esta original propuesta combina técnicas clásicas de los métodos alternativos de solución de conflictos (MASC) con herramientas propias del “derecho callejero” desarrollado por el Proyecto Transgénero. Hemos implementado un pensum único de formación de medidadores especializad@s en problemáticas propias de la diversidad sexo-genérica: las que son el resultado de la discriminación social (por ejemplo, problemas que enfrentan las personas transgénero en el entorno laboral); las que se desprenden de la ausente o deficiente protección legal (por ejemplo, problemas que enfrentan las familias compuestas por parejas del mismo sexo); y las que se derivan de las especificidades culturales de las comunidades de base trans e intersex en diversas localidades (por ejemplo, conflictos propios del ejercicio del trabajo sexual callejero). El perfil de l@s participantes – líderes y lideresas trans de todo el país – es cuidadosamente escogido por el Proyecto Transgénero. Vari@s de ell@s están trabajando en la incorporación de la mediación a sus realidades locales.

2012- 2013: (6) Litigio de reconocimiento de una “familia callejera” (en proceso): Esta intervención legal, de autoría de la activista del Proyecto Transgénero Elizabeth Vásquez, busca que el sistema judicial ecuatoriano reconozca existencia y conceda protección jurídica a una familia no convencional. Esta está compuesta por varias trabajadoras sexuales trans que se consideran “hermanas de calle” y que comparten vivienda y una economía solidaria sin que medie parentesco consanguíneo ni de afinidad, ni relación alguna de índole conyugal o equivalente. Esta intervención comprende la implementación de acciones legales basadas en el pluralismo jurídico, la interpretación incluyente de la protección constitucional a la “familia en sus diversos tipos” y el litigio estratégico. Comprende también un diálogo arte-derecho que registra fotográfica y testimonialmente la vida cotidiana de las familias trans callejeras, poniendo en tensión la "verdad" oral y cotidiana de su experiencia con la "verdad procesal" del sistema jurídico.