Sobre los comentarios negativos a propósito de la “Encuesta Nacional de Relaciones Familiares y Violencia de Género contra las Mujeres”, asombra escuchar y leer quejas muy ingenuas.
Unas, las de personas a quienes sólo la estadística oficial pareciera haberles despertado a la realidad de la violencia. Asombra tanto asombro.
¿No sabían que ésta era la realidad? ¡Qué bueno! La estadística ha cumplido entonces su objetivo. Pero lo más ingenuo es aquello de que "entonces esto demuestra que las campañas publicitarias contra la violencia han fracasado". ¡Por favor!!!
Las campañas cumplen la importantísima labor de poner un tema históricamente invisibilizado, minimizado y privatizado en la agenda pública. Pero es obvio que ni una campaña, ni varias, ni todas, van a poder borrar por arte de magia el problema sociocultural y estructural de la violencia de género.
Un poquito más de perspicacia periodística nos haría bien. Y al César lo que es del César: felicitaciones a quienes en lugar de eludir el problema de la violencia hacen campañas y generan la existencia de una estadística oficial en el Ecuador capaz de abrir la puerta a políticas públicas y de paso abrir los ojos a quienes desconocían el problema de la violencia. Felicitaciones porque, a diferencia de otr@s, están haciendo lo que pueden y lo que deben.
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